La vacunación es un tema muy importante tanto en animales como en personas.
Las vacunas le dan al cuerpo información sobre enfermedades para que cuando éste tenga que enfrentarlas lo pueda hacer más efectivamente. El sistema inmunológico es el encargado de defender el cuerpo contra enfermedades, él nota cuando una enfermedad entra al organismo, la confronta, y la guarda en su memoria, de esa forma cuando se encuentre nuevamente con esta misma enfermedad la pueda reconocer y vencer rápidamente.
Vacunar es esencial y fundamental, no proporcionárselas es colocarlo en un alto riesgo de contagio ante enfermedades infecciosas, donde algunos virus son de consecuencias muy graves. En caso de los gatos aunque no salga de la casa, nunca se está completamente seguro de que no se llegue a escapar o, incluso, de que no va a entrar algún otro gato de la calle. Hasta en los balcones más altos o en terrazas, inexplicablemente, a veces aparecen gatos que se han escapado de otros pisos. Aunque ellos no salgan a la calle y nosotros sí, podemos contagiarlos de manera indirecta, través de nuestros zapatos o ropa. Las enfermedades infecciosas contra las que se vacunan los gatos son: rinotraqueitis, panleucopenia, calicivirosis y la antirrábica, las primeras tres son la denominada triple felina.
Nunca hay que olvidarse de la vacunación contra la rabia la cual es obligatoria por ley.
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